Un grupo de 43 ciudadanos colombianos deportados desde Panamá arribó al Aeropuerto Internacional José María Córdova, en el municipio de Rionegro, como parte de un operativo de control migratorio adelantado por las autoridades del país centroamericano.
El retorno se realizó a través de un vuelo chárter coordinado por el Servicio Nacional de Migración de Panamá, luego de que se determinara que 30 de las personas no cumplían con los requisitos legales para permanecer en ese país. Adicionalmente, otros 13 ciudadanos fueron expulsados bajo protocolos especiales de seguridad, al ser considerados una amenaza potencial para el orden público, tras la verificación de antecedentes judiciales y administrativos.
El grupo estuvo conformado por 38 hombres y 5 mujeres, quienes fueron recibidos por autoridades colombianas en Rionegro, encargadas de adelantar los procedimientos correspondientes para su ingreso al país.
De acuerdo con la información oficial, la operación se llevó a cabo respetando el debido proceso y los derechos humanos de los deportados, y hace parte de las acciones implementadas por Panamá para fortalecer el control migratorio y prevenir la permanencia de personas vinculadas a actividades ilícitas.
Las autoridades señalaron que este tipo de medidas buscan garantizar la seguridad nacional y promover una migración regular, ordenada y conforme a la ley, en coordinación con los países de origen.
