Pasear por un campo rodeado de coloridos y apetitosos productos es, quizá, el recuerdo de algunos que, durante gran parte de su vida, labraron vastas zonas para llevar a su mesa o al mercado alimentos de la mejor calidad, pues vieron en la siembra la posibilidad para obtener un sustento alimenticio y, en otros casos, económico, siendo la agricultura uno de los principales sectores que impulsan las finanzas de muchas familias antiqueñas.
Pese a que hoy por hoy la práctica de la agricultura ha disminuido, muchos son los que aún la trabajan y viven de ella, más desde el ámbito económico que para uso personal, pues hay que reconocer que dicha labor requiere de hombres y mujeres dispuestos a trabajar de sol a sol y con un nivel tan alto de conocimiento que pueden entender el lenguaje de los comestibles, pues dicha práctica va más allá de plantar una semilla, regarla y arar la tierra.
Antioquia, al ser un territorio con tierras fértiles y un clima propicio para el cultivo y tratamiento de diferentes productos agrícolas, se convierte en el escenario perfecto para que pequeños y grandes productores planten y comercialicen sus cosechas, no obstante, en ocasiones, hace falta la intervención de otros entes y actores que garanticen que dicho producto, efectivamente, llegue a un consumidor.
Por lo anterior, surge la necesidad de crear asociaciones que ideen estrategias y proyectos para que cada uno de los agricultores –pequeños y grandes– tengan la posibilidad de vender sus productos de manera segura, entregándole al consumidor cosechas de buena calidad y con prácticas de siembra más sanas, tanto para el productor como para el comprador. Un ejemplo de dichos entes es la Asociación de Horticultores de Rionegro (ASPHOR).
ASPHOR
Para el año 2005, época en la que la agricultura—junto con la pesca, la ganadería, la caza y la silvicultura—tenía la posición más alta en la rama de ocupación, según el DANE, con 3.844.623 (tres millones ochocientos cuarenta y cuatro mil seiscientos veintitrés) empleos y un porcentaje del 4,4, se crea la Asociación de Horticultores de Rionegro (ASPHOR), con el ánimo de contribuir para que la agricultura, desde el sector horticultor, creciera, beneficiando, principalmente, a quienes la trabajaban.
La señora Olga Lucía Amaya, quien para ese momento era funcionaria de la Secretaría de Agricultura de Rionegro y el entonces Secretario de la misma dependencia, Hugo González Arias, fueron quienes motivaron la creación de ASPHOR, en ese entonces con 12 agricultores de hortalizas, con el fin de progresar mediante el trabajo en equipo.
Según Julio Ospina, presidente de la Asociación, ASPHOR se creó “viendo la necesidad de que los proyectos a nivel nacional se podían gestionar, pero con la gente organizada, porque a un campesino individual no le dan recursos, entonces, para poder acceder a esos recursos ante el Ministerio de Agricultura, a nivel nacional, debía ser con la gente asociada” afirma.
Asimismo, cuenta Ospina que durante la creación de ASPHOR se conformaron otras asociaciones que buscaban congregar a los productores de los diferentes gremios, como Asproler y Aprofut, la primera enfocándose a la agrupación lechera y la segunda a la de fruta en tamaño pequeño, cada una de ellas buscando un beneficio para la asociación a la cual representan. Hoy por hoy, Asproler y Aprofut son socios clave de ASPHOR.
Por otra parte, cuenta el Presidente de la Asociación de Horticultores de Rionegro que, desde el año de la fundación, 2005, hasta el 2011, ASPHOR estuvo ligada a las Administraciones Municipales, pero que, por consejo de un abogado, decidieron desligarse de ella, puesto que muchos factores se podrían ver afectados o modificados dependiendo del Gobernante del momento. Por ello, dice Julio, la Asociación es totalmente independiente de la Administración, solo se rige por los estatutos legales que sean establecidos desde el ámbito nacional.
Contribución social
Como se dijo, la Asociación busca el fortalecimiento de cada uno de los horticultores o asociados y, al ser una sociedad sin ánimo de lucro, contribuye para que los logros y beneficios sean recibidos por cada uno de los afiliados. Por eso, ASPHOR lidera campañas y ejecuta acciones donde se atienden, especialmente, las necesidades del gremio, tanto desde el ámbito en que laboran, como desde un aspecto más personal.
Asegura Julio, presidente de la Asociación, que “el pequeño productor se beneficia con la comercialización directa –porque lo hacemos directo– sin necesidad de intermediario, porque un producto, para llegar al ama de casa, pasa por dos o tres canales de comercialización. En este caso, se compra directamente al productor y ya se comercializa directamente, o sea que se están eliminando dos canales de comercialización, y podemos pagarlo a mejor precio al productor y podemos darle mejor precio al consumidor final”.
Del mismo modo, ASPHOR contribuye para que, tanto el productor como su familia, se vean beneficiados por la Asociación, es por esto que cada año se le hace entrega de un kit escolar, valor de 70 mil pesos, a los afiliados que tengan hijos escolarizados. Es así como la congregación la conforman también las familias de los horticultores.
Asimismo, cuenta Ospina, la entidad realiza campañas de capacitación para sus asociados, esto con el fin de brindarles diferentes y nuevas alternativas que pueden ser implementadas en sus siembras. Adicional a esto, ASPHOR ha proporcionado insumos a, aproximadamente, 15 productores, buscando así “darles una mano” para que mejoren las prácticas de cultivo.
Obstáculos superados
Según Julio Ospina, en el año 2014, la entidad tuvo que afrontar una crisis que los llevó a contemplar la posibilidad de liquidar, pues se presentó una decaída en los precios de los productos y malos manejos en la parte administrativa. No obstante, dice el presidente de ASPHOR, han sabido sortear cada una de las dificultades que se les ha presentado.
“Para ese momento, en el 2014, teníamos deudas por alrededor de 100 millones de pesos y en el momento nos recuperamos y le dimos vuelta a la hoja, ya tenemos unas utilidades, más o menos, cercanas a esos 100 millones de pesos, que todos estos recursos se les retribuyen a los asociados productores”, afirma Julio.
Por otra parte, expone Ospina, el alto costo de los terrenos es otro factor que ha hecho parte de las crisis del sector agrario. “En Rionegro, el alto costo de las tierras ha incidido a que nuestros campesinos vendan y dejen de cultivar”. Es por esto que, como se dijo al principio, el porcentaje de labradores del campo ha disminuido, puesto que se están viendo en la obligación de buscar otras alternativas que les permitan obtener recursos para su manutención.
En cuanto a la situación del alto costo de los terrenos, el representante de la Asociación, hace un llamado para que disminuyan los costos catastrales y, así, evitar que los agricultores deban desplazarse a otros lugares. “No sé cómo vamos a hacer para que ahora se tenga un alivio catastralmente, que no le cobren tanto impuesto a los campesinos y, la verdad, en este momento es exorbitante. Entonces qué tiene que hacer el campesino, vender, irse para otros lados, o desplazarse, pero no de violencia, sino por la parte del alto costo de las tierras” expresa.
Contribución ambiental
Para ASPHOR, la implementación de producciones más limpias y amigables con el medio ambiente se ha convertido en una prioridad, puesto que, dentro de sus objetivos sociales, contemplan este aspecto como elemento fundamental a la hora de instruir a sus asociados, logrando con esto no sólo el cultivo de un producto con menos intervenciones químicas, sino, además, un nivel de conciencia mayor en el productor frente a la importancia de entregarle una cosecha más sana al consumidor final.
“La idea es que la Asociación logre cultivar más limpio, sin tanto agroquímico, porque ahora vemos mucha enfermedad, jóvenes de 15 o 20 años con cáncer, es preocupante, entonces la idea es en el 2020 tener más fincas agroecológicas, orgánicas, de producción orgánica y que nuestros productores se vuelvan unos empresarios de su finca”, expresa Ospina.
Asegura el Presidente de la entidad que gran parte de los asociados, quienes actualmente son 60, garantizan producciones con mejores prácticas agrícolas, siendo este uno de los valores agregados que tiene ASPHOR para quienes compran en la corporación.
Crecimiento: de la región al país
Gracias a las diferentes actividades que ha realizado la Asociación, esta se ha dado a conocer en diferentes escenarios regionales y del país, lo cual le ha posibilitado exponer sus procesos y prácticas, proporcionando así elementos clave que pueden ser aprovechados por otras entidades o personas.
De esta manera, cuenta Ospina que han realizado ferias agropecuarias en el parque principal de Rionegro, han llevado a cabo procesos con el Centro de Investigación Ambiental (CEAM), en Marinilla, han participado de mercados verdes o producción orgánica en el Jardín Botánico de Medellín, lo anterior desde ámbito regional. Así mismo, desde un escenario nacional, han participado en proyectos liderados en Bogotá, con el Ministerio de Agricultura y con el Departamento para la Prosperidad Social (DPS).
Los asociados de ASPHOR, según Julio, se ubican, principalmente, en “el distrito agrario del municipio, que es la zona centro, la zona norte del municipio que es la vereda Santa Bárbara, Los Pinos y se concentran, más o menos, en Mampuesto, Cuchillas, Abreo… más que todo estamos en esa parte. Tenemos de otras veredas, pero de donde estamos más concentrados es en zona centro y zona norte” asegura.
Además, manifiesta que los afiliados no solo pertenecen a Rionegro, sino que, también, hay agricultores de El Carmen de Viboral, Marinilla y otros municipios de la región.
Un llamado a apoyar estas asociaciones
El Presidente de ASPHOR, Julio Ospina, hace un llamado a los consumidores para que compren los productos que distribuye la Asociación que lidera. Invitar a todas las amas de casa y a empresarios para que compren en ASPHOR, que ahí no se está enriqueciendo una persona, sino que se está fortaleciendo un grupo de campesinos directamente de la región”.
Asimismo, hace un llamado a los funcionarios de agricultura para que tengan un mayor liderazgo y beneficien a los productores con proyectos y recursos. “Hay muchos recursos para el campo, lo que pasa es que hemos tenido de pronto malos “gestionadores”, porque, en verdad, en Rionegro hemos tenido Secretarios de Agricultura que no saben dónde están parados, que ellos mismos son los que deben de tratar buscar recursos para los campesinos del municipio y se quedan dormidos y no lo hacen y se pierde la plata, porque plata hay mucha, lo que pasa es que no la sabemos gestionar o no tenemos forma de quienes nos colaboren, entonces cómo diseñar proyectos para poder jalonar todos esos recursos que hay y podérselos brindar a nuestro productores”, expresa Julio.
Gildardo Ospina, quien hace parte de ASPHOR desde el 2006 y tiene su parcela en la vereda La Laja, en los límites con Las Cuchillas, afirma que los beneficios de pertenecer a la Asociación son muchos “porque comercializamos los productos ahí, ya es una ayuda muy grande para uno, también nos colaboran con el estudio para los menores, con el kit escolar, proyectos de invernaderos, parcelas, también tenemos reuniones, fiestecitas, paseos”. Ospina es productor de cilantro, brócoli, lechuga y aguacate, cada una de sus cosechas es comercializada, directamente, por ASPHOR, lo cual, para él, simboliza “tener el mercado asegurado”. Asimismo, extiende una invitación para futuros asociados: “Invitar a todos los que quieran pertenecer a la Asociación ASPHOR, que cultiven el campo, que ahí tienen el mercado asegurado para los productos y el futuro está en el campo” dice. |
Gustavo Adolfo Villa Ramírez pertenece a ASPHOR hace ocho años y se enfoca, especialmente, al cultivo de tomate. “Yo solamente cultivo tomate, hace, por ahí, once años que tengo de cultivar tomate, no solamente acá con la Asociación, sino aparte” asegura. Villa tiene una apreciación favorable de la Asociación, pues destaca que los productos sean comercializados directamente por ASPHOR, además de la asistencia técnica que les dan a quienes cultivan. “Ha mejorado la comercialización, no tenemos que ir a la plaza o a una tienda a ofrecer el producto, sino que, directamente, la Asociación, se encarga de todo eso. Solamente es cosechar bien, con buenas prácticas agrícolas” comenta. En la actualidad, Gustavo se encuentra estudiando Gestión en Empresas Agropecuarias, y su proyecto formativo tiene que ver con los cultivos hidropónicos con lechuga crespa, pero en sus planes está implementarlo con tomate y fresa, esto con el fin de dar un apoyo académico a ASPHOR. “Cambiar un poco la mentalidad del agricultor tradicional, manejar mejores prácticas agrícolas, llevar un buen proceso y una trazabilidad de todo el producto, para con eso sacar un producto de excelente calidad y, de alguna manera, tener un valor agregado por ello”. Por último, invita a quienes deseen vincularse a la Asociación y la destaca como un canal de comercialización donde el productor no necesita salir a diferentes entidades vender su cosecha. “La invitación es que se asocien, en la forma de pago es muy acorde, los pagos también son en las fechas pactadas, y esa sería como la invitación, aparte de las capacitaciones y todos los beneficios que tiene ser asociados”. |
Productos que comecializa |
Frutas |
Mora, Fresa.
Papaya (Maradol, Zucchini y Papayuela). Manzana Gala, Piña Manzana. Mandarina, Mago (Tomy). Naranja Valencia, Guanábana, Borojó. Pera Judía (Verde, Plana, Gulupa). Maracuyá, Guineo, Melón, Lulo. |
Hortalizas |
Brócoli, Tomate Chonto, Aguacate (Hass, Papelillo, Reed y Santana).
Coliflor, Cebolla, Pepino Cohombro, Cilantro. Remolacha, Limón Taití, Zanahoria. Papa Silvestre, Papa Criolla. Fríjol Cargamanto, Tomate de Árbol. Fríjol Verde, Arveja, Pimentón. Espárragos, Lechuga (Crespa y Batavia). |