
Hoy, en el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, rendimos homenaje a las mujeres colombianas que han resistido frente al dolor y la injusticia. En un país marcado por el conflicto armado, más de 4.9 millones de mujeres, Es decir, el 50,21% del total de víctimas (9.804.387), incluidas en el Registro Único de Víctimas (RUV), han enfrentado diversas formas de violencia: sexual, psicológica, económica y vicaria, entre otras.
Estas mujeres no solo han soportado el peso de las desigualdades históricas, sino que también han alzado su voz como líderes en la lucha por la dignidad, la justicia y la memoria. A pesar de intentos de silenciar sus liderazgos, su resiliencia ha sido el motor de redes de resistencia que han tejido esperanza en medio del dolor.
El impacto del conflicto armado ha recaído con especial dureza sobre niñas y adolescentes, quienes representan el 41% de las mujeres víctimas. Además, el 21% de las mujeres afectadas tienen alguna pertenencia étnica, lo que resalta la intersección entre género, racialización y desigualdad estructural en Colombia.
Sin embargo, las mujeres han transformado su sufrimiento en fuerza colectiva, liderando procesos organizativos que demandan verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición. A través de estos espacios, no solo sanan heridas, sino que también abren caminos hacia una paz sostenible.
Este 25 de noviembre, el compromiso es claro: erradicar todas las formas de violencia que persisten y construir una sociedad donde cada mujer pueda vivir con dignidad y sin miedo. Hoy, honramos no solo el dolor, sino también la fuerza de quienes son pilares fundamentales para una Colombia en paz.