Siempre pensé que las modas pretendían ser algo sofisticado, que diferenciara a las personas y premiara ese simple hecho de querer destacar, así esa “moda” fuera algo incomprensible, raro e incluso feo a primera vista. Si te hacia diferente y llamativo, aquello que usaras podía darte el calificativo de “esa persona está a la moda”. Sin embargo, fue luego de muchos años, y gracias al desorden que las calles del centro de Rionegro tienen hoy en día por lo que comencé a observar que la moda tiene otro factor de vital importancia, el entorno que nos rodea.
Y es que en nuestro municipio, Rionegro, se pusieron de moda las botas pantaneras y los tenis con manchas de barro, pues al menos quienes a menudo tienen que pasar por la zona del parque, saben lo que es enfrentarse al gigantesco desorden que hay en las vías aledañas a él, por cuenta de las calles abiertas hace más de 6 meses.
Pero si bien, estas intervenciones a las calles se han hecho por la necesidad de cambiar la red de alcantarillado y en algunas zonas las redes de energía eléctrica, es inaudito pensar que en esto se demoren tanto tiempo, y más aún cuando en varios casos, las calles se ha abierto, reparado y abierto de nuevo, pues esto además de ser totalmente ineficiente debe generar un sobrecosto enorme.
Se deben mencionar además las afectaciones que ha traído a la comunidad rionegrera estas intervenciones en las calles, pues el comercio, la movilidad, la seguridad, y en algunos casos incluso la salud de los transeúntes se ha visto afectada, puesto que el comercio disminuye si por las calles se dificulta transitar, y quienes aún tienen ánimos para recorrer las zonas intervenidas deben enfrentar la preocupación por los peligros latentes que hay detrás de cada lona verde por las noches, o en las tardes calurosas, caminar con un tapabocas por el polvo que se levanta, y que afecta a estos ciudadanos en su sistema respiratorio; todo esto sin contar los variados casos de caídas o accidentes que se han presentado por estas obras.
Ahora bien, hace poco, una nueva calle iba a ser intervenida, y los comerciantes de la zona, con toda razón, se opusieron y bloquearon el camino, pues de entrada saben que más de 6 meses con la calle que da vida a sus negocios cerrada, es una muerte comercial para ellos. Pero la pregunta acá no es si su actuar fue razonado, la pregunta debe ser, ¿Por qué la administración, Rionegro tarea de todos, insiste en intervenir nuevas calles, sin haber sido capaz de concluir las demás labores que ya llevan algún tiempo?
Yo creo que esto responde al afán que ha demostrado esta administración de presentar obras y mostrar desarrollo. El problema surge cuando, como dice el refrán, “el que mucho abarca, poco aprieta”, se busca hacer mucho sin la capacidad, al menos desde la planeación que es donde creo han fracasado miserablemente, desde luego e irónicamente, también sin planearlo.
Y reitero, el cambio de tuberías, alcantarillado, red eléctrica y lo que requiera mejoras o reparación es algo fundamental, pues todos queremos un buen servicio, sin embargo, queremos un buen servicio en todo, y esto implica también la eficiencia y celeridad con que se realizan las obras que el municipio necesita para su crecimiento.
Ahora, mientras esperamos que las calles sean reparadas, y se comiencen a solucionar todos estos problemas que se derivan de estas obras y alteraciones viales, iré a comprar mis botas pantaneras, ya que presiento que esta moda se multiplicará con las lluvias de últimos meses del año…; espero equivocarme, pero como veo las cosas no logro vislumbrar una moda de sandalias ni tacones así como tampoco visualizo la pronta reparación de las calles, nuestras calles.