Camilo Rodríguez, presidente de la Cámara de la Confección envió una petición al Gobierno Nacional para que ropa y textiles tengan un IVA diferencial.
Desde la Cámara Colombiana de la Confección elevaron una petición al Gobierno Nacional para que dentro de la reforma tributaria se establezca una reducción en el IVA para garantizar la producción textil nacional y la mano de obra colombiana.
“Hemos hecho una solicitud al gobierno nacional para introducir en esta reforma tributaria un IVA diferencial para el sector de las confecciones que esté fijado en el cinco por ciento, esto dada la coyuntura actual del sector de las confecciones y teniendo en cuenta que gran impacto en el empleo industrial en Colombia”, señala Camilo Rodríguez, Presidente de la Cámara Colombiana de la Confección.
Para el Presidente de la Cámara de la Confección, esto potenciaría la producción nacional que hoy es superada por mucho por las exportaciones de ropa y textiles que llega al país. “Con el fin de garantizar la demanda de mano de obra nacional, es menester que el gobierno central implemente, adicionalmente a las medidas de reformas arancelarias, una reducción del impuesto al valor agregado (IVA) en las confecciones”.
Según Rodríguez, esto permitiría, no solamente recuperar la mano de obra perdida últimamente, sino adicionalmente potencializar el sector de las confecciones que ya es conocido con el impacto directo en la generación de empleo industrial.
Por esta razón, piden una reducción del cinco por ciento en el IVA que asegura, sería similar al que, de data vieja, tuvieron los licores, los vinos y los aperitivos, cuyo objetivo inicial era que en su momento se legalizara la importación de estas bebidas que mayoritariamente ingresaban al país por contrabando, y que, a partir de esa reducción fiscal se logró la legalización y el acopio fiscal de este mercado.
Con esto buscan hacer frente al contrabando y que se estimule la compra colombiana: “Sin duda alguna uno de los grandes flagelos que tenemos hoy en día es el blanqueo de capitales por vía de contrabando y que especialmente se nutre del ahorro, o no pago, de tributos a nivel nacional. Adicionalmente hay que diferenciar que la tasa de cambio para el dólar negro de los contrabandistas está alrededor de los 3.000 pesos por cada dólar”, explica Camilo Rodríguez.
Esta situación asegura que ha generado una competencia desleal con la formalidad y buscan que con el IVA diferencial se pueda disminuir el contrabando y la evasión de impuestos que hoy tienen en jaque al mercado de las confecciones.
“Yo pienso que los objetivos que se tendrían al adoptar una medida como la propuesta son la reducción de la informalidad del sector que actualmente está cerca del 70 por ciento, en donde las pymes del sector de las confecciones para competir no pueden asumir el impuesto actual del 19 por ciento y por tanto están tácitamente obligadas a mantenerse al margen de la tributación y de la formalidad”, añade el Presidente de la Cámara Colombiana de la confección.
Esperan una respuesta del nuevo Gobierno Nacional en cabeza de Gustavo Petro y el Ministro de Hacienda José Antonio Ocampo para “romper con este ciclo vicioso que ha afectado gravemente al sector de las confecciones conformado especialmente por micros y pequeñas empresas”. Con el IVA diferencial para las confecciones, se le quitaría un incentivo al contrabandista al restarle un importante porcentaje de rentabilidad a su accionar delictivo que sería de aproximadamente un 14 por ciento.
Rodríguez explica que al ser la mano de obra directa cerca del 60 al 80 por ciento del valor agregado generado por las confecciones, el IVA sobre el valor agregado no es otra cosa que un impuesto directo sobre el empleo en lugar de incentivar la generación del mismo.
Según Camilo Rodríguez, el acuerdo sería un gana-gana para el Estado y la industria de la confección colombiana: “no habría un mayor costo fiscal sino, por el contrario, se generaría un aumento en la tributación efectiva por la alta tasa de evasión actual que es aproximadamente del 70 por ciento del producto hecho en Colombia, y el 75 por ciento del producto extranjero”.
Finalmente, Camilo Rodríguez señaló que este cinco por ciento de reducción por IVA diferencial representaría la inclusión masiva de la mano de obra formal con todas las prestaciones sociales. “Mejoraríamos también la situación financiera del régimen subsidiado de salud. Al reducirse el costo de las prendas por la disminución de los 14 puntos del IVA sin duda alguna habría un aumento automático de la demanda interna con los concebidos efectos en la economía y sobretodo con la mano de obra al generar muchísimo más empleo en el país”, puntualizó el Presidente de la Cámara Colombiana de la Confección.