El turismo, al convertirse en las últimas décadas en una de las actividades económicas más importantes y generadoras de recursos del mundo, requiere de un tratamiento y un entendimiento especial de los diferentes factores que inciden en esta actividad. Entender adecuadamente como el territorio acepta o se interrelaciona con los aspectos y/o condiciones que le rodean, facilitará la generación de escenarios donde los impactos sociales, económicos y ambientales sean positivos, contribuyendo así a la competitividad y sostenibilidad del turismo a largo plazo.
Los acelerados cambios y crecimientos que hoy se representan en el sector turismo del Oriente Antioqueño han despertado el interés de entidades y administraciones municipales por intensificar, aplicar los esfuerzos necesarios y definir un modelo de desarrollo del turismo en Oriente, más específicamente en la Zona Embalses.
Este modelo se ha concretado en su intención de construir la Agenda de Competitividad Turística para la Ruta de Naturaleza, Aguas y Piedras, una estrategia de trabajo que transforma y desarrolla infraestructuras competitivas para el turismo desde lo público y atrae inversión privada. Esta iniciativa toma como referencia el modelo exitoso de acompañamiento y de construcción de una agenda similar para la Ruta Cultural y Artesanal del Oriente que vincula a algunos municipios de la Zona Altiplano.
A partir del liderazgo de la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño, el rol del SENA Oriente, la apropiación de las oficinas de turismo local y la vinculación de otros actores como Cornare, la Dirección departamental de Turismo, la Red de Corporaciones Turísticas de Antioquia, entre otras, se pretende construir un producto turístico relevante e innovador con características experienciales para empresarios, turistas y habitantes de esta zona, que de manera directa o indirecta podrán beneficiarse y mejorar sus condiciones de vida.
Sobre el impacto y la importancia de esta iniciativa, Julián Isaza Mejía, profesional de proyectos de la Cámara de Comercio del Oriente Antioqueño, comenta que “esta agenda genera el espacio para evaluar el potencial turístico con el que cuenta la Zona teniendo en cuenta los atractivos, la oferta de servicios, la demanda real, los canales de distribución, la participación social y empresarial y, por supuesto, el conocimiento de las tendencias del mercado para lograr el mejoramiento del destino y construir fortalezas y oportunidades en el encadenamiento del producto turístico ligado a la oferta turística existente y por construir”.
La consolidación de este proyecto se realiza con el propósito de trazar las acciones necesarias para generar un salto significativo en el desarrollo del turismo en el corto, mediano y largo plazo, procurando tanto la sostenibilidad como la competitividad que requiere esta actividad para su adecuada evolución y fortalecimiento mediante iniciativas innovadores en la zona.
Sobre el avance en la construcción, Margarita Carmona Osorio, secretaria de la mesa de trabajo de la Ruta Naturaleza, Aguas y Piedras, menciona que “se han convocado a los municipios que hacen parte de la Zona Embalses para iniciar con la conformación de la misma, como primer paso empezamos a construir el Plan de Sostenibilidad, dándole a entender a los representantes la importancia del turismo en el desarrollo económico de la región y la importancia de no trabajar desde un municipio en particular sino desde un conjunto de municipios como territorio”.
Por su parte, Hernán Darío Urrea, alcalde del municipio de Guatapé, uno de los municipios involucrados en la Agenda, menciona que “a Guatapé pueden llegar entre 15.000 y 30.000 turistas por fin de semana y estamos trabajando fuertemente en el fortalecimiento del turismo y de crear nuevos espacios para atender toda la oferta que tenemos”. La participación en este proyecto, está encaminada precisamente a las acciones de fortalecimiento para propender por la sostenibilidad y competitividad de esta actividad en su municipio.
La Ruta de Naturaleza, Aguas y Piedras articula paisajes, embalses y ríos, además de batolitos (piedras) de gran tamaño y significado. Todo este conjunto enriquece el patrimonio natural y ambiental consolidándose una oferta turística sólida para el desarrollo de actividades lúdicas, recreativas, deportivas, náuticas, deportes de aventura, esparcimiento en balnearios, entre otros.
El recorrido de esta ruta puede iniciarse indistintamente por la vía Medellín-El Peñol o desde la vía Barbosa-Concepción. Por la primera vía se pasa por las poblaciones de Marinilla, El Peñol, Guatapé, San Rafael y San Carlos, con la posibilidad de completar el anillo hacia la población de Granada y El Santuario, conectando con la autopista Medellín-Bogotá. Por la vía Barbosa- Concepción se pasa por las poblaciones de Concepción y Alejandría, y desde allí se puede conectar con Guatapé o San Rafael. Desde Alejandría también puede seguirse hacia el Nordeste (vía a Santo Domingo), así como desde San Carlos se puede seguir hacia Puerto Nare, en el Magdalena Medio.
La riqueza hídrica de sus municipios marca ese plus o diferenciador que a la Zona Embalses le ha merecido reconocimiento no solo en lo local y regional, sino también en lo nacional e internacional.
Todo lo anterior debe complementarse con el componente cultural tan propio del departamento y del que hacen parte su historia, tradición, manifestaciones tradicionales, arquitectura, entre otros aspectos con un alto valor para la definición y desarrollo de una serie de actividades altamente atractivas para cualquier turista, y que hoy es posible soportar con una buena capacidad en su planta y facilidades para la recepción de estos turistas, gracias a la existencia, principalmente, de una oferta de servicios de alojamiento y gastronomía que facilitan la estadía de estos en los diferentes municipios.
Información de: www.ccoa.org.co
