Por: Natalia Restrepo
El último comunicado que presentó la Procuraduría General de la Nación, en noviembre del año pasado, acerca de la crisis que afronta el sector salud en el país, dejo en evidencia el estado crítico en el que se encuentra la EPS Coomeva. La cual desde el 2012 se encuentra bajo vigilancia especial y con medidas preventivas de manera ininterrumpida, no obstante, según la procuraduría la situación ha empeorado en los últimos seis años.
Por esto, el documento de la Procuraduría a la Superintendencia (ente encargado de inspeccionar y vigilar determinadas actividades económicas y de servicios en todo el país), asegura que “esta EPS afronta un desorden administrativo que solo en 2017 la llevó a incumplir el 91,87% de los compromisos de pago que tenía durante esa anualidad”.
El barco se hunde
Ante esta crisis Coomeva ha optado por dejar de operar en algunos municipios de Colombia. Abejorral, San Carlos, El Peñol y El Retiro han sido algunos de los 45 municipios de Antioquia donde Coomeva dejó de prestar sus servicios del régimen contributivo, para así lograr garantizar la prestación de servicios en aquellas regiones donde tiene mayor número de afiliados.
Según Javier Alejandro Bedoya, secretario de salud de La Ceja, “la dificultad con Coomeva en el municipio es grandísima, todo es problema de cartera entra la EPS y la IPS, entonces uno como secretaria queda sin poder tomar ninguna medida”, así mismo aseguró que Coomeva le adeuda a La Clínica San Juan de Dios 5 mil millones de pesos. Debido a esto, dicha entidad suspendió, desde abril de 2016, los servicios de unidad de cuidados intensivo, consulta externa y hospitalización en siquiatría para los 22 mil usuarios de la EPS del municipio. Por esto, solo son atendidas las urgencias básicas catalogadas como triage 1 y 2, hasta tanto se cumplan los acuerdos de pago. Así mismo sucede en el Hospital San Juan de Dios del municipio donde solo son atendidos los usuarios de Coomeva por urgencias vitales.
Debido a esto los usuarios de la EPS deben trasladarse a otros municipios para realizar los procedimientos médicos, “Es absurdo que un usuario tenga que viajar a Rionegro para un examen de colesterol, de sangre o cualquier examen, porque hay usuarios que no pueden viajar por falta de dinero”, comento Sergio Martínez veedor de Salud.
Esta situación llevó a que en el 2018 fueron interpuestas 314 tutelas, con la ayuda de la Personería municipal, para hacer cumplir el derecho a la salud de los usuarios de Coomeva, no obstante, “hubo un tiempo que ni con tutela se pudo garantizar el derecho a la salud, motivo por el cual algunas tutelas terminaban en desacato”, afirmó Marta Luz Salinas personera municipal. Además, agregó que la situación de la EPS en el municipio se volvió más crítica cuando la IPS Santa María, cerró sus puertas el 17 de diciembre por el no pago de Coomeva EPS correspondiente a seis quincenas consecutivas. Situación que obligó a dicha entidad a subcontratar con Promedal, para así garantizar algunos servicios a los usuarios. Luego de un acuerdo de pago la IPS retomo la atención a los usuarios.
Salvavidas
Debido a esta situación, el 9 de agosto del año pasado, los concejales Daniel Castro y Orlando Ríos citaron a una reunión en el concejo municipal, en la que participaron delegados de Coomeva, el gerente de la Clínica San Juan de Dios y el Hospital, representantes de la comunidad, de la veeduría en salud y la personera municipal. Allí se tomó la decisión de acudir a la Secretaria de Salud y Protección Social de Antioquia para buscar soluciones a esta crisis. “Desde la visita que se realizó a la Secretaria de Salud y Protección Social de Antioquia ha habido un acompañamiento constante de esta, lo que ha agilizado un poco el cumplimiento de la prestación de servicios por parte de Coomeva”, sostuvo la personera municipal.
Por otro lado, desde la Secretaria de Salud y Protección Social del municipio, se buscó ampliar la cobertura de afiliaciones con otras EPS prestadoras de servicio en La Ceja, como lo es Sura y Salud Total. Debido a esto, Sura paso su tope de afiliaciones de 31mil a 38 mil usuarios, lo que generó que, al 31 de diciembre de 2018, 6 mil usuarios de Coomeva se trasladaran a dichas EPS. “Nosotros desde la secretaria no podemos inducir a los usuarios a que se trasladen a otras EPS, simplemente es tratar de que la gente tome conciencia de que en este momento una buena opción es que se trasladen”, comenta el Secretario.
Contra viento y marea
A pesar de la fuerte crisis que afronta Coomeva tanto en La Ceja como a nivel nacional, no todos los usuarios están de acuerdo con la lluvia de críticas que le cae a la EPS cada vez que un servicio es negado. “Yo digo que eso es un tema de paciencia, a veces nosotros como usuarios somos muy desesperados”, sostuvo Maria Gloria Botero usuaria de Coomeva y presidenta de la asociación de usuarios de la IPS Santa María, quien además tiene un largo proceso con la EPS, dado que, desde los cuatro meses su hijo Sebastián Ruiz desarrollo parálisis cerebral, debido a esto, Coomeva mensualmente debe entregarle a Sebastián pañales, medicinas, vitaminas y citas de control. “hasta el momento a mí Coomeva no me ha negado nada del tratamiento de Sebastián, a pesar de que todo ha sido con tutelas”, aseguro Gloria Botero.
La Secretaria de Salud, la personería, la veeduría y los demás actores que han presentado su preocupación por el tema, seguirán buscando alternativas que ayuden a solventar la problemática de salud que padece todo el país. Sin embargo, estas estrategias seguirán enfrentando obstáculos mientras no se dé una discusión seria por las entidades encargadas, donde se defina cuál será el futuro de aquellas EPS que atraviesan crisis financieras. Para que de esta forma se conforme un sistema de salud que vele por la atención y el bienestar de sus usuarios.
