El oriente antioqueño se prepara para recibir uno de los proyectos turísticos más ambiciosos de América Latina: el Cristo del Embalse, una escultura monumental de 86 metros de altura que se levantará en el municipio de El Peñol, frente al embalse que comparte con Guatapé. Más allá de su simbolismo religioso, la obra se perfila como un ícono internacional que integrará fe, turismo, paisaje e innovación tecnológica.

Con el anuncio oficial del inicio de su primera fase constructiva, el proyecto marca un hito en la ingeniería monumental del país: la utilización de impresoras 3D Creality, equipos comerciales ampliamente disponibles en el mercado, para la fabricación de los moldes que darán forma a la escultura.

Tecnología Creality: impresión 3D comercial aplicada a gran escala

Uno de los aspectos más llamativos del proyecto es que no se están utilizando prototipos experimentales ni tecnología exclusiva, sino impresoras 3D convencionales de la marca Creality, reconocida a nivel mundial por su uso en educación, industria, arquitectura y diseño.

Creality es una empresa internacional especializada en fabricación de impresoras 3D FDM (modelado por deposición fundida), ampliamente utilizadas tanto por aficionados como por profesionales. Sus equipos destacan por precisión, estabilidad y escalabilidad, lo que ha permitido que hoy sean aplicados en un proyecto monumental sin precedentes en Colombia.

En el caso del Cristo del Embalse, las impresoras Creality están siendo utilizadas para producir piezas de aproximadamente 30 centímetros, que luego se ensamblan para conformar grandes moldes. Estos moldes servirán como base para dar forma a la cabeza del Cristo, la primera estructura visible de la obra.

Cada impresión se realiza con precisión milimétrica, garantizando que las piezas encajen perfectamente y que los moldes finales sean uniformes, resistentes y fieles al diseño original.

Un centro de impresión 3D en El Peñol

Para desarrollar este proceso, el proyecto contempla la adecuación de una gran bodega en El Peñol, que funcionará como centro de impresión 3D. Allí, decenas de impresoras Creality operarán de manera continua, produciendo las piezas necesarias para la cabeza y, posteriormente, para otras secciones del monumento.

Este espacio no solo será el corazón técnico de la construcción, sino también una plataforma educativa y comunitaria. El centro estará abierto a estudiantes, emprendedores y visitantes interesados en conocer de cerca cómo funcionan las impresoras 3D comerciales y cómo estas pueden aplicarse a proyectos reales de gran escala.

De esta manera, la tecnología Creality no solo cumple un rol constructivo, sino que se convierte en una herramienta de formación y transferencia de conocimiento, acercando a la comunidad local a un campo tecnológico con creciente demanda global.

Innovación aplicada al turismo religioso

El Cristo del Embalse no será únicamente una escultura monumental. El proyecto está concebido como un complejo turístico integral, donde convergen espiritualidad, innovación, naturaleza y entretenimiento.

Desde el interior de la estatua, los visitantes podrán acceder a un mirador panorámico mediante un ascensor, desde donde se observará el embalse Peñol-Guatapé, la Piedra del Peñol y el paisaje característico del oriente antioqueño.

El desarrollo turístico incluirá, además:

  • Un mall comercial con 76 locales, enfocado en artesanos, gastronomía y emprendimientos.
  • Un resort con hotel y lodges, integrados al entorno natural.
  • Un teleférico de 1,2 kilómetros que conectará el casco urbano de El Peñol con la vereda Guamito, donde se ubicará el monumento.

Todo el complejo es liderado por el grupo desarrollador Montecielo, con la visión de consolidar un destino que combine experiencias religiosas, culturales y tecnológicas.

Un ícono mundial con sello colombiano

El Cristo del Embalse aspira a convertirse en el Cristo más grande del mundo, superando referentes internacionales como el Cristo Redentor de Río de Janeiro. Sin embargo, el proyecto va más allá de un récord: busca posicionar a Colombia como un país capaz de integrar tecnología accesible, como la impresión 3D Creality, en obras de escala global.

Las proyecciones indican que el monumento recibirá cientos de miles de visitantes al año, dinamizando sectores como el comercio, la hotelería, el transporte y los servicios turísticos del oriente antioqueño.

Fe, memoria e innovación

La escultura también tiene un fuerte contenido simbólico. Representa la memoria del Viejo Peñol, sumergido bajo las aguas del embalse en los años setenta, y el renacimiento del Nuevo Peñol, construido con resiliencia y visión de futuro.

En ese sentido, el uso de impresoras 3D Creality se convierte en un símbolo adicional: tecnología accesible puesta al servicio de la memoria, la fe y el desarrollo regional.

Una revolución silenciosa hecha con impresoras comerciales

La construcción del Cristo del Embalse demuestra que la impresión 3D ya no es una promesa futura, sino una realidad presente, capaz de transformar la manera en que se conciben y ejecutan proyectos monumentales.

Que este proceso se realice con impresoras Creality disponibles en el mercado, y no con maquinaria exclusiva, envía un mensaje poderoso: la innovación está al alcance de los territorios que se atreven a pensar diferente.

Con el inicio de la fabricación de la cabeza del Cristo, El Peñol no solo comienza la construcción de un monumento, sino también la de un nuevo relato, donde fe, paisaje y tecnología se unen para proyectar al oriente antioqueño al escenario mundial.

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