El Oriente Antioqueño es una tierra llena de maravillas y día a día no deja de sorprender a propios y visitantes, contando con una biodiversidad envidiable en cualquier parte del mundo y no es de sorprender que estas tierras mágicas cuenten también con uno de los pequeños grandes pulmones selváticos de nuestro país.
Te invitamos a que conozcas las increíbles selvas del Oriente Antioqueño, ubicadas entre los municipios de San Francisco, El Carmen de Viboral, Sonsón y Argelia.
Esta aventura comienza en San Francisco, pueblo sencillo, campesino, enclavado en las montañas selváticas del Oriente antioqueño, que nos servirá como puerta de entrada a los más profundos secretos que la naturaleza esconde en las vastas selvas de esta zona bien conservada. Son 30kilómetros cuadrados aproximadamente de solo selvas, sin carreteras, poblados o cultivos extensivos, conectada solo por antiguos caminos dentro de la selva.
Hasta hace solo diez años no era posible visitar estas hermosas tierras, puesto que era uno de los fortines de los grupos insurgentes en el departamento de Antioquia y que gracias a la desaparición de las Farcen esta zona y su posterior desminado por parte del Ejército Nacional, con el apoyo de algunas ONGs especializadas, hoy podemos disfrutar de todos los mágicos secretos que allí nos aguardan con una diversidad en su flora y fauna.
El conflicto armado no permitía disfrutar de estas tierras. Sus montañas varían entre los 3100 y los 800 metros sobre el nivel del mar, dan acogida a los Ríos Verdes, el río Melcocho, El Páramo de Sonsón en el Cerro de La Vieja y el camino prehispánico de Murringo, uno de los más desconocidos y mejor conservados de Antioquia. Esta zona selvática del Oriente Antioqueño es uno de los últimos refugios poco estudiados de la mega-biodiversidad del país, así catalogados inclusive por el Instituto Von Humboldt en Colombia.
cortesía de goexplorecolombia
fotos Erwin Ramírez y Marcelo Jaramillo R.