La Gobernación de Antioquia presentó un balance positivo de su plan de austeridad: una estrategia que permitió reducir gastos de funcionamiento por 235 mil millones de pesos, recursos que ahora están siendo redirigidos hacia obras y programas sociales de alto impacto.
La iniciativa hace parte de una de las promesas de campaña del gobernador Andrés Julián Rendón y consistió en evitar cargos innecesarios, reducir contratos por prestación de servicios, limitar viajes al exterior, eliminar gastos superfluos como planes de celular y disminuir el presupuesto en publicidad institucional.
“Sabemos que estas decisiones no son cómodas para todos, pero eran necesarias para ordenar la casa y honrar la confianza de los antioqueños”, afirmó el mandatario departamental.
Gracias a este ahorro, la administración anunció inversiones en frentes clave como infraestructura vial (incluyendo la vía al mar Gonzalo Mejía Trujillo), proyectos de vivienda, prevención de desastres, atención social y programas contra el hambre, como el Plan Arrullos Antioquia, alimentación escolar y pensiones vitalicias para adultos mayores en situación de vulnerabilidad o discapacidad.
En total, durante 2024, el departamento ejecutó más de 806 mil millones de pesos, y se espera que las políticas de ahorro continúen en lo que resta del periodo.
