Desde el 1 de junio del presente año, los Rionegreros y habitantes de los municipios cercanos que utilizamos la motocicleta como un medio de transporte dentro de nuestro municipio estamos condicionados por el decreto 186 que expidió el alcalde Hernán Ospina fruto de las recomendaciones que le dieron diferentes organismos de seguridad de Rionegro.
Nuestra inconformidad radica en el hecho de que seamos condenados por los comportamientos delincuenciales de otros individuos que no se sabe si son o no de Rionegro y si son pues la forma más acertada de combatir no es hacer una prohibición que afecte a ciudadanos de bien, los delincuentes seguirán buscando la forma de delinquir, no solo en moto atracan o matan, también lo hacen a pie, en carro, bicicletas, no solo hombres también mujeres. Se le acabó la creatividad a las autoridades, buscan la solución aparentemente más fácil, y ¿dónde quedan las personas de bien que viajan desde las veredas en moto y que no cuentan con otro medio veloz para transportarse?
¿Cuantas motos y parrilleros son castigados por un decreto injusto?
En Rionegro son más 30 mil motos matriculadas. De municipios como el Carmen y la ceja dia
riamente hacen uso del paso por Rionegro entre 500 y 600 motos, si sumamos son 1000 o 1200 personas que utilizan este medio de transporte para desplazarse a lugares de trabajo o a ejecutar diligencias personales, por tal motivo, decidí convocar a una marcha motorizada el pasado 5 de Junio, motivado por los mensajes que se suscitaban en las redes sociales –todos en contra de tal decreto- donde dejé claro que no era un evento politizado, que no era en contra del gobierno de Hernán Ospina si no de una de sus decisiones, no para faltarle al respeto a su dignidad como persona si no buscando conciliar ante el actuar del alcalde que escuchó a los organismos de seguridad para beneficiar al pueblo pero no tomo en cuenta al pueblo.
La gente no quiso marchar por temor a rumores de disturbios
Porque es con una justa razón, con argumento y respeto que alzamos la voz en son de protesta Los diferentes medios de comunicación radiales, televisivos y escritos nos permitieron difundir la información que convocaba, no solo en Rionegro si no en los municipios cercanos que son afectados con la norma. Desgraciadamente hubo rumores sin fundamento que decían que grupos delincuenciales se infiltrarían en la marcha para causar disturbios, razón por la cual se cree la gente no quiso marchar, sin embargo sabíamos que era una convocatoria abierta y que todo tipo de personas participarían por eso nos acompañó un buen grupo de hombres pertenecientes a la policía nacional y al tránsito de Rionegro.
Aunque no marchamos, varios de los asistentes fuimos al palacio municipal donde esperábamos dialogar con el señor alcalde, no se pudo porque estaba en reunión y sin marcha no tendría excusa para levantarse de manera urgente de la mesa. Nos atendieron la secretaria de transporte y el subsecretario, les hicimos entrega del radicado del documento con carácter de derecho de petición donde solicitamos derogar el decreto o en caso tal de no ser posible modificarlo.
El día anterior a la marcha (jueves 4) el alcalde me citó a su despacho, asistí, hablamos del tema y se comprometió a revisar el decreto que tiene muchos vacios, hasta el día de hoy, no ha habido respuesta alguna de parte de la administración, ellos por derecho de petición tienen 15 días para responder, pero más allá de una norma esta el bienestar del pueblo, pueblo que por lo visto no les importa lo suficiente.
Por lo pronto he seguido el conducto regular, ellos según el mal elaborado decreto dicen que quien desee se le expedirá un permiso para que puedan transitar con un parrillero, yo como afectado lo solicité, debo decirlo, no me lo negaron.
Hay que salir de las redes sociales y dar la cara como ciudadanos unidos
Quiero invitar a la gente de Rionegro y sus alrededores para que demos la cara ante las diversas adversidades sociales y si no estamos de acuerdo con algo, alcemos la voz pero poniendo como carta de presentación el rostro, porque por las redes sociales muchos hablaban y se quejaban, pero a la hora de pasar del bla bla bla a la acción, como siempre, se dijeron – que otros lo hagan- y … finalmente solo cinco personas fuimos para pedir que nos traten con justicia. Por ser tan cobardes y negligentes los mandatarios que otros han elegido (porque hasta para ir a votar nos da pereza) vienen a atropellar decidiendo egoístamente.
¿En que parara esto? No sabemos, por ahora están las promesas de un hombre que ante todo es político y sin degradar sabemos que muchos dedicados a esto solo prometen pero no cumplen, sin embargo bien merecido lo tenemos por quejarnos y no hacer nada.
Si seguíamos siendo indiferentes el precio será no ser dirigidos si no manipulados. Es otro tema pero no solo a los Rionegreros si no a todos los colombianos nos falta mucha unión, si la tuviéramos hace rato habríamos dado un golpe de estado al presidente actual.
John Fredy Arenas García
Solo un ciudadano
