Un pie diabético es aquella condición donde el pie de una persona que padece Diabetes presenta Heridas o úlceras. Este se produce debido a la disfunción de los nervios periféricos, la inadecuada circulación y las deformidades que ocurren en huesos y articulaciones a causa del aumento de la glicemia circundante en estos pacientes (azúcar en sangre).
En américa latina la diabetes mellitus afecta a más del 13 % de la población adulta mayor de 18 años y sigue aumentado año tras año. Aproximadamente el 15% de los pacientes diabéticos desarrollan una ulcera en el pie y uno de cada 7 pacientes desarrollan 1 o varias ulceras en los pies a lo largo de su vida.
La infección del pie es la causa más común de amputación no traumática en los pacientes con diabetes, cada 30 segundos se amputa una extremidad inferior en algún lugar del mundo.
Factores de riesgo
En personas con diabetes, las úlceras del pie aparecen como consecuencia de una interacción de factores de riesgo, el pie diabético no se ulcera espontáneamente. A fin de desarrollar iniciativas para prevenir las ulceraciones y, con ello, caras y dolorosas amputaciones, es importante comprender cómo y porqué suceden estas úlceras.
Cuando las personas con diabetes pierden la sensibilidad en los pies, suelen producirse las siguientes lesiones:
§ Formación de rozaduras y úlceras, que podrían infectarse, tras llevar zapatos demasiado pequeños y/o descubiertos.
§ Regiones irritadas dolorosas y/o úlceras tras meter el pie en agua demasiado caliente.
§ Úlceras no dolorosas causadas al tropezarse con un objeto al caminar descalzo, sin que se aprecien síntomas que avisen de la necesidad de descansar y tratar la úlcera.
§ La neuropatía, que es el daño de los nervios, también produce sequedad de piel y hace que se genere un engrosamiento y endurecimiento de la misma (callosidades) en las zonas del pie que soportan más peso.
§ Las lesiones de los vasos sanguíneos que riegan las piernas y el pie (enfermedad vascular periférica) son también más frecuentes en personas con diabetes si las comparamos con quienes no tienen la afección y podrían aparecer con la neuropatía, siendo un factor de riesgo de suma importancia.
§ El daño de articulaciones y huesos se genera por lo general con el uso inadecuado de calzado.
Signos y síntomas
Es muy importante la exploración de la piel, ya que eso nos va indicar la presencia alteraciones que podrían desencadenar en una úlcera.
En pacientes diabéticos la piel tiende a ser deshidratada y sin vello, las uñas serán frágiles, quebradizas y se es muy propenso a hematomas subungueales. En condiciones normales, la piel y en general los tejidos blandos de la planta del pie poseen la propiedad de la viscoelasticidad para adaptarse a soportar mejor las cargas, sin embargo en el paciente diabético se ha perdido esta propiedad, como consecuencia de la glucosa acumulada en los tejidos, volviéndola dura y gruesa en zonas de presión generando callosidades y úlceras ocultas.
Cuidados del pie diabético
Los pacientes que padezcan de pie diabético pueden tener en cuenta algunas pautas de autocuidado para minimizar las complicaciones.
• Inspeccionar a diario el pie, entre los dedos, la planta y el talón para detectar lesiones. Si es necesario, utilizar un espejo como ayuda.
• Utilizar calzado adecuado, teniendo en cuenta que debe ser cerrado y de suela firme, ni muy apretado ni muy justo.
• Examinar los zapatos antes de ponértelos. Para compra de calzado, idealmente probarlo en horas de la tarde, pues en la mañana siempre se encontraran más delgados los pies.
• Cambiar los calcetines y zapatos diariamente.
• Evitar las caminatas descalzo, el piso puede tener elementos que causen lesiones indetectables.
• Evitar el agua o almohadillas eléctricas para calentar los pies.
• Dejar que un podólogo (especialista en manejo de los pies) te quite los callos.
• Cortar las uñas de forma recta y limar suavemente los bordes y aristas.
• Lavar los pies con agua y jabón y secarlos muy bien entre los dedos.
• Evitar el uso de agua demasiado caliente para ducharte.
• Aplicar crema hidratante en los pies cada día después de bañarte.
En orientesalud contamos con equipo idóneo (Médicos, enfermería profesional con entrenamiento en manejo de heridas, asesoría por parte del programa RUTA DEL PIE SANO y tecnología en cuidado de heridas), una vez ingresa un paciente con una úlcera diabética, habitualmente remitidos desde una consulta de atención primaria, de diabetes o, desde el servicio de urgencias del hospital o clínica, la primera evaluación corre a cargo de un médico entrenado en el tema para llevar a cabo una valoración tanto de lesión como del paciente.
Por: orientesalud