Las Empresas de Transporte Urbano Rionegro, Transportes Chachafruto y Rápido Medellín Rionegro, constituidas en la Unión Temporal “Oírnos en Rionegro” y que cuentan en conjunto con 285 vehículos que actualmente prestan servicio urbano y vereda,, cifra que representa el 68% del total del parque automotor, expresaron que nunca se han apartado de los procesos que adelanta la Administración de Rionegro para implementar el Sistema Integrado de Transporte Sonrío, pero pidieron espacios de diálogo y concertación que propendan por un sistema que no sea excluyente, brinde servicios de calidad y comodidad para los usuarios y logre la sostenibilidad en el tiempo del sistema, para lo cual piden claridad sobre la tarifa de los 1.700 pesos, sobre el recaudo de esa tarifa y sobre la reestructuración de las actuales rutas del transporte urbano y veredal, antes que acogerse al Sistema propuesto por la Administración.

Con respecto a la tarifa, los transportadores agrupados en Oírnos en Rionegro anotan que “En la actualidad se presta el servicio con una tarifa promedio de $2.000 en todas las rutas, precio fijado de acuerdo con la canasta de costos del transporte y que rige desde el año 2018 por disposición de la actual administración; y lo que se anuncia ahora de una tarifa de integración sin importar el número de transbordos en una hora de $1.700. De acuerdo a los análisis económicos y financieros que se hacen no le dan sostenibilidad al sistema, y dicha tarifa no ha sido sustentada con estudios técnicos realizados por entidades certificadas por el Ministerio de Transporte que conozcamos”.

Más adelante, anotan que “SOMOS habla de una estructuración de la tarifa con 90.000 pasajeros (50.000 del municipio de Rionegro y 40.000 de los municipios vecinos que no ingresarían al casco urbano), y que de acuerdo con lo establecido en el anexo del decreto 194 del 2019 respecto a la implantación del sistema “Sonrío” fase 1, los pasajeros intermunicipales no se tendrían en cuenta para el efecto, sino que a futuro en la hipotética fase 2, se integraría el transporte intermunicipal con el municipal (Integración física y tarifaria).

De acuerdo con los análisis técnicos que hemos hecho en el modelo propuesto de “Sonrío”, la tarifa técnica estaría cercana a los $3.500 en un escenario conservador y garantizando 50.000 pasajeros diarios pagando tarifa plena, lo que conlleva a que sea necesario una subvención o subsidio por parte de la municipalidad a efecto de darle sostenibilidad al sistema, lo que de entrada se ha advertido por parte del gobierno local que no hay recursos para estos efectos.

Sistema de recaudo

Los transportadores de “Oírnos en Rionegro” también plantean innumerables dudas sobre el sistema que se anunció para el recaudo centralizado de los pasajes y anotan al respecto que “Consideramos que el apoyo de los medios tecnológicos para el recaudo de la tarifa es bienvenido en la medida que se tenga claridad, desde un principio, en el manejo del mismo, considerando que como práctica de toda la vida los propietarios de los vehículos han venido manejando los ingresos y gastos de acuerdo con su leal saber y entender, sin intermediarios y en forma artesanal. Siempre hemos manifestado que se hace necesario antes de su implementación, conocer todos los aspectos inherentes al sistema y sus externalidades, lo que hasta la fecha no ha tenido respuesta.  Lo que se ha determinado por parte de la administración municipal de hacer una promoción o regalo de 60.000 tarjetas a los rionegreros, no puede esconder lo que representa el alto costo de la tarjeta ciudad de $12.000 para los usuarios del servicio, lo que a no dudar desestimularía al usuario para transportarse en el sistema. La tarjeta cívica inicial en la ciudad de Medellín no tiene ningún costo y la reposición por pérdida o deterioro tiene un costo de $3.550”.

Sobre este aspecto, plantean los siguientes interrogantes: Que se indique desde ya quién es el operador logístico de la tecnología de recaudo, porque SOMOS está designado como ente gestor del sistema integrado “Sonrío”, pero no el que provee la tecnología; qué porcentaje de participación en la tarifa va a tener el proveedor tecnológico o el ente gestor del recaudo por el concepto del recaudo centralizado; quién asumirá el costo de los equipos para gestión de flota que ya han sido embarcados en los vehículos actuales (GPS, conteo de pasajeros y sensores de puertas) por orden de la autoridad de transporte municipal que hoy todavía está en proceso de pago por parte de los propietarios, y que no serían compatibles para el sistema de recaudo con tarjeta; qué participación va a tener el operador del transporte (Empresa/propietario), en los beneficios que arroje el sistema por concepto de intereses que generen los dineros del recaudo; qué participación va a tener el operador del transporte (Empresa/propietario), en los beneficios que arroje el sistema por concepto de los dineros que quedan como remanentes (Saldos insolutos de las tarjetas), al no ser utilizados en el sistema, que de acuerdo con la resolución 0655 de 2019 estarán vigentes por 24 meses a partir de la última recarga, lo que permite que no se reconozca ni se devuelva saldo alguno y finalmente, qué participación va a tener el operador del transporte (Empresa/propietario), en los beneficios que arroje el sistema por concepto de ingresos por publicidad en el medio de pago (tarjeta Ciudad).

Las rutas

Los representantes de “Oírnos Rionegro” también hacen serios cuestionamientos sobre las rutas que están anunciadas para el Sistema Sonrío, pues, según ellos, no obedecen a estudios serios sobre origen y destino de los pasajeros. Expresan que en la actualidad el servicio se cubre de manera eficiente y con cobertura total, (según estudios contratados por la administración municipal, Steer Davis & Gleave), por parte de seis empresas en 31 rutas. La propuesta que plantea la administración es pasar a cubrir el servicio con 21 rutas, donde se observa que el sistema se diseñó en escritorio y no en campo, toda vez que no consulta la infraestructura que hoy tiene la municipalidad, tanto en el sector urbano como rural, como tampoco las necesidades reales de los usuarios del servicio y desconoce la metodología vigente establecida para estos efectos, exigidas por parte del Ministerio de Transporte.

De acuerdo con los representantes de Oírnos Rionegro, para el diseño de las 21 rutas estblecidas para el Sistema Sonrío no se realizaron los estudios de campo a través del método de Encuestas Domiciliarias complementado con el registro de placas de los vehículos y el método de Ascenso y descenso de pasajeros en las rutas propuestas, un ejemplo de ello es la ruta denominada “Bodega La Feria”, e igualmente las recientes planteadas por las empresas que firmaron el memorando de entendimiento (Cooptranrionegro, Flota Córdova Rionegro S.A. y Flota Rionegro S.A.), como son Express Belén, Porvenir- Centro- San Antonio, San Antonio- Porvenir- Centro, las propusieron y aprobaron sobre planos y se asignaron la mayor participación en un indignante proceso de canibalismo.

No hay criterios claros que establezcan el número de vehículos, las frecuencias de despacho, teniendo en cuenta el número de pasajeros, las necesidades y características de cada sector, la programación para descanso de conductores y tiempo para mantenimiento de vehículos. Ejemplo puntual, las rutas Bodega Feria y Express Belén, que con un mismo índice de pasajeros, tienen respectivamente 3 y 10 vehículos asignados y otra ruta como 4 Esquinas- El Rosal, que con un índice de pasajeros mucho menor a las dos rutas anteriores tiene asignados 20 vehículos. Genera confusión y desconfianza el hecho de que la información publicada en diferentes medios oficiales y actos administrativos se contradigan. No hay claridad sobre cuáles serán las rutas con sus recorridos, ya que existen en 3 decretos diferentes listas y descripciones de rutas que no coinciden entre sí.

Se desconoce qué suerte correrán los 155 vehículos tipo taxi colectivo que no han sido incluidos dentro de la reestructuración de rutas. Vale recordar que este aspecto modifica sustancialmente el valor de la tarifa.

Ante tantos cuestionamientos, los transportadores agrupados en “Oírnos en Rionegro” no se acogen a la propuesta de la Administración para implementar el sistema Sonrío, así en el esquema planteado por parte de Somos estén incluidos sus vehículos.

Loading

Comentarios