Centros Especializados de San Vicente Fundación abre al público su nuevo servicio, la Clínica de Anticoagulación; un espacio de educación, control y seguimiento para las personas que reciben anticoagulantes orales, con el fin de prestarles una atención integral en su proceso y que puedan controlar, de manera fácil, adecuada y segura, sus niveles de anticoagulación con el propósito final de lograr la disminución de complicaciones asociadas. Un paciente anticoagulado es quien tiene una patología de base o enfermedad crónica, que requiere un tratamiento especial con medicamentos para disminuir el riesgo de formación de coágulos o trombos en la sangre que puedan lesionar distintos órganos como el cerebro, el corazón o el pulmón, generando infartos o trombosis.
Las personas que ingresan a la Clínica de Anticoagulación se clasifican en tres situaciones: Los pacientes nuevos, los pacientes especiales, que son quienes presentan niveles de anticoagulación difíciles de controlar o aquellos que van a someterse a un procedimiento quirúrgico; y el tercer grupo son los que ya llevan un periodo en nuestra clínica y están en seguimiento.
Este nuevo servicio, al cual se puede acceder a través de la EPS o de manera particular, está dirigido por un equipo interdisciplinario que cuenta con cardiólogo electrofisiólogo, médico general, enfermeras profesionales y auxiliares de enfermería que constantemente optimizan la terapia anticoagulante para cada persona según sus necesidades, brindan un monitoreo periódico de los niveles de anticoagulación, enriquecen el conocimiento del paciente, vigilan el bienestar de él, y sistematizan los resultados para garantizar un adecuado seguimiento.
Adicionalmente se cuenta con el apoyo de otras especialidades como: medicina interna, cirugía cardiovascular, vascular periférico, y neurología clínica, quienes intervienen en el cuidado del paciente según la pertinencia y cada caso en particular.
Sumado al conocimiento y calidad de los profesionales de la Clínica de Anticoagulación, se cuenta con el equipo CoaguChek que permite obtener inmediatamente, con un nivel mínimo de dolor, los resultados de los exámenes, ofreciendo rapidez y comodidad al paciente, y un ajuste preciso y oportuno de su medicación, además de disminuir complicaciones que requieran consultas por el servicio de urgencias y hospitalizaciones.
Existen programas de anticoagulación que prestan algunas EPS a sus afiliados y tienen elementos en común con la Clínica de Anticoagulación; sin embargo, existen dos diferencias claves del servicio que ofrece Centros Especializados: Primero, su programa educativo compuesto por 4 módulos en los que se enseña al paciente y a sus cuidadores sobre la enfermedad, el medicamento, los tipos de complicaciones, los cuidados y se erradican los mitos injustificados que los pacientes tiene alrededor de la anticoagulación. Después de tomar uno a uno los módulos, el paciente se gradúa y se certifica como experto para poder llevar su control desde su hogar. Segundo, el dispositivo CoaguChek, que permite un monitoreo frecuente y ágil del INR y la obtención de resultados en dos minutos, para no tener que esperar los resultados de laboratorio ni acudir a la cita médica para que sean interpretados. “Este equipo de última tecnología posibilita tomar decisiones de dosificación en la misma consulta, más certeras y sin dolor. Todos estos beneficios, junto con el equipo humano, dan como resultado pacientes y cuidadores disciplinados que saben de su enfermedad y conocen su tratamiento, por lo tanto logramos evitar complicaciones tan graves como sangrado o trombosis”, manifiesta Laura Castañeda Mesa, médica encargada del programa.
Dentro de los beneficios que ofrece la Clínica está la carnetización con los datos de identificación, enfermedad, anticoagulante, otros medicamentos y médico tratante del paciente, junto con una cartilla que reúne toda la educación que necesitan los pacientes y sus familias, lo que les permite tener esta información a la mano cuando sea necesaria.
