Durante la época decembrina, el uso de la pólvora se vuelve común y constante, no sólo por profesionales y entrenados manipuladores de este compuesto, sino, además, por las personas del común, quienes, para acompañar sus celebraciones del fin de año, hacen uso de esta, exponiéndose a sufrir accidentes que, posiblemente, acaben con sus festividades.
La pólvora se compone por varios químicos, los cuales la hacen altamente explosiva, inflamable y tóxica. La combustión de la pólvora se inicia fácilmente por el contacto con llamas, calor, fricción y golpes, motivos que obligan a que su manejo sea muy cuidadoso y responsable. Además, cuanto este elemento explota produce gran cantidad de humo y gases tóxicos.
Asimismo, las lesiones de la pólvora no solo se enfocan en las quemaduras o explosiones, puesto que el ruido generado también puede generar lesiones como la pérdida transitoria de la agudeza auditiva y definitiva, además de provocar lesiones timpánicas.
Entre las consecuencias que puede generar se enfocan en incendios, heridas, intoxicaciones, muerte y mutilación. Lo que más se lamenta es que los menores de edad son quienes más sufren las consecuencias, las cuales, en ocasiones, les dejan secuelas para toda la vida.
El Periódico El Oriente, invita a toda la comunidad del Oriente Antioqueño a hacer un uso responsable de la pólvora durante esta temporada decembrina. No permitas que este tiempo de alegría, amor y unión familiar se manche por los vestigios de la pólvora.
