El duelo emocional… superando pérdidas

0
9

El duelo emocional es un proceso de adaptación que nos permite restablecer el equilibrio personal que ha quedado alterado por una pérdida; estas pérdidas pueden estar relacionadas con personas, relaciones de pareja, de amistad, empleos, mascotas, pertenencias entre otras. Las consecuencias emocionales están directamente relacionadas con lo que hemos perdido y también con el modo en el que se ha producido la pérdida: el tiempo de relación, la intensidad y las circunstancias de esa relación, lo imprevisto de la pérdida… Pero siempre supone un gran dolor, tristeza, desestructuración, desorganización emocional y psicológica. Todo este fenómeno sucede en los seres humanos, porque poseemos un estilo mental que se acostumbra a tener y a ser estable en lo que tiene, es decir, por naturaleza no estamos diseñados para perder o experimentar el vacío.

A pesar del sufrimiento que causa, el duelo emocional es un proceso necesario y ayuda a adaptarse a la pérdida, prepara para vivir sin la presencia física de esa persona, cosa o situación y es fundamental, para conducir correctamente el vínculo afectivo de forma que sea compatible con la realidad de cada persona en su tiempo presente.

 

Su duración es muy variable, pero podemos considerar que el primer año suele ser el más duro, de todas formas cada persona tiene su propio ritmo y necesita un tiempo distinto para la adaptación a su nueva situación. Lo recomendable, es que una persona en duelo, trate de trabajarlo lo más pronto posible, es decir, que los sentimientos de tristeza, impotencia y desesperación, logre superarlos de una manera rápida y consciente, ojala antes del año, esto con el fin de ayudarle a la mente a encontrar nuevas estrategias de afrontamiento más positivas y prevenir la aparición de síntomas realmente patológicos como la depresión, la ansiedad o el estrés agudo. Algunas características de los procesos de duelo son:

Sentimiento: Tristeza, enfado, culpa o auto reproche, ansiedad, soledad, fatiga, impotencia, shock, anhelo, alivio, insensibilidad.

Sensaciones físicas: Vacío en el estómago, opresión en el pecho, opresión en la garganta, hipersensibilidad al ruido, sensación de despersonalización (camino calle abajo y nada me parece real, ni siquiera yo), falta de aire, debilidad muscular, falta de energía, sequedad de boca.

Conductas: Trastornos de sueño y alimentarios, conductas distraídas, aislamiento social, soñar con lo que se perdió, hiperactividad desosegada, llorar, visitar lugares, atesorar objetos que pertenecieron a la persona o situación perdida.

 

Todos los seres humanos hemos atravesado una situación de duelo, dado que en algún momento de la vida hemos perdido algo importante o significativo, la intención es poder ser conscientes para poder superarlo de la manera más sana posible. A continuación te brindo algunas recomendaciones que pueden ser muy útiles para el proceso de superación:

  1. ACEPTACIÓN. El primer paso y el más importante es aceptar lo que te está sucediendo, asumir una posición realista frente a la perdida. Aunque no es fácil, permítete darte cuenta que has perdido y solo así podrás vencer a tu propio ego y poder asumir una actitud madura y objetiva.

 

  1. EXPRESAR LOS SENTIMIENTOS. Siempre habrá una persona dispuesta a escucharnos y a compartir el dolor que sentimos por la ausencia de lo que perdimos. Habla de lo sucedido y de todas las emociones que esto te genera, cuando no expresamos todas esas emociones de tristeza y frustración, podemos caer en un estado de aislamiento que nos afectará más en el duelo y hará sentir muy mal a quienes nos rodean.

 

 

  1. LA VIDA CONTINUA: Aunque perder a alguien o algo que ha sido importante, puede ser muy complejo y nos quita las ganas de seguir el ritmo normal de nuestra vida, la realidad es que la vida continúa y hay otras personas que también nos necesitan. Procura hacer actividades que te distraigan y que te gusten, comparte con tus amigos y familiares, busca espacios que te generar bienestar y satisfacción, permanecer en el sufrimiento no genera ningún alivio, lo único que hace es que caigamos en el lugar del victimismo y la incapacidad.

 

  1. REALIZA ACTIVIDADES SIMBÓLICAS DE DESPEDIDA: esto consiste en que puedas utilizar algunas herramientas como la escritura de cartas, hablar frente al espejo o hacer monólogos contigo mismo, donde te despidas de esa persona o situación y le puedas decir todo lo que sientes y piensas, esto ayuda a la mente a liberar tensión y a minimizar la posibilidad de quedarnos anclados en la negación y permanecer sufriendo por largo tiempo por la misma situación.

 

 

  1. BUSCA AYUDA PROFESIONAL: es claro que existen algunos duelos que pueden ser muy fuertes y generar malestares significativos que afectan nuestra estabilidad emocional, en caso que esto suceda, es importante buscar ayuda profesional de psicólogos y psiquiatras que aporten recursos en la elaboración de dicho duelo, y así prevenir la aparición de enfermedades mentales.

 

Recuerda que los procesos de duelo emocional, son la oportunidad para conocernos, crecer y aprender de nosotros mismos, asumiendo una posición más fuerte y autónoma en nuestras propias vidas.

 

Por: Paula Andrea Restrepo Arango

Psicóloga

Loading

Comentarios