En algún momento todos nos hemos sentidos tristes, abatidos y sin ganas de realizar alguna actividad, esto es normal por cambios físicos y psicológicos de nuestro cuerpo y nuestra mente en un corto periodo, sin embargo, si los síntomas persisten se podría estar frente a un trastorno depresivo, algo que esta catalogado como enfermedad mental.
¿Qué es la Depresión?
Es una enfermedad psicológica que se caracteriza por un sentimiento de profunda tristeza, decaimiento anímico, pérdida de interés por todo e imposibilidad de experimentar placer o capacidad de disfrutar de cualquier experiencia. Se prolonga por un extenso periodo de tiempo, (6 meses o más) afectando el orden de la vida cotidiana y relaciones sociales. La depresión es la principal causa mundial de discapacidad y es el trastorno mental más frecuente tanto en Europa como en los países latinoamericanos. Se calcula que esta enfermedad afecta a 350 millones de personas en todo el mundo y que en un futuro la sufrirán 8 personas de cada 10 según la OMS, una cifra realmente alarmante.
Su origen no depende de la debilidad, fragilidad o carácter de una persona, es una enfermedad equiparable a otra patología crónica como la diabetes, aunque factores como el estrés y ansiedad constante pueden influir en su aparición. Una de las consecuencias más letales de la depresión es la probabilidad tan alta de suicidio, es decir que del total de personas que padecen dichos síntomas entre el 8 y 10% atentan contra su vida.
Causas de la Depresión
Existen varios factores que pueden influir en su desarrollo, unos de maneras más directas que otros:
- El Tabaquismo y alcoholismo: la nicotina y el alcohol poseen efectos negativos sobre el organismo, entre ellos suele afectar el funcionamiento de los neurotransmisores en el cerebro, produciendo un mayor nivel de dopamina y serotonina, por lo tanto esto genera un desequilibrio hormonal y puede predisponer la aparición de síntomas depresivos.
- Problemas de tiroides: cuando la glándula tiroides no funciona bien y tiene fallos en la producción de hormonas tiroideas, como es el caso del hipotiroidismo, puede provocar depresión, ya que una de las funciones de estas hormonas es regular los niveles de serotonina, la horma encargada de la regulación del estado de ánimo.
- Insomnio: aparte de la fatiga, la irritabilidad y otra de las consecuencias de no dormir es la depresión, el cansancio generado al dormir poco genera vulnerabilidad y afecta a la toma de decisiones, algunos lo atribuyen a la falta de contacto con la naturaleza y el estrés originado por las grandes ciudades.
- Situaciones estrés permantes: las personas que viven sometidas a situaciones de alto estrés tales como problemas laborales significativos, problemas de dinero permanentes, conflictos de pareja y familia, maltrato, abuso sexual, están mucho más predispuestos a padecer síntomas depresivos.
Algunos síntomas de la Depresión.
Entre los principales síntomas que se pueden manifestar se encuentran:
- Imposibilidad de sentir placer y disfrutar momentos gratificantes.
- Pérdida de interés ante situaciones, cosas y personas.
- Irritabilidad o mal genio constante.
- Sentimiento de culpa sin sentido alguno.
- Pensamientos pesimistas y suicidas.
- Alteración de los ciclos de sueño, causando déficit de descanso.
- Cambios somáticos como fatiga, cambios en el apetito, variaciones de peso, disfunción sexual y problemas de estómago.
- Disminución de la calidad de vida al verse afectada la funcionalidad del individuo para llevar a cabo actividades de su vida cotidiana, afectando sus relaciones sociales, familiares, trabajo, estudio y rutina doméstica.
¿Qué hacer ante una posible Depresión?
Ante la sospecha que se padece depresión se recomienda seguir las siguientes pautas:
- Ser comunicativo y expresar todos los sentimientos sin miedo a ser juzgado
- Acudir al médico y al psicólogo, los cuales pueden diagnosticarlo y prescribir el tratamiento adecuado.
- Pedir ayuda si surgen pensamientos suicidas y estar acompañado hasta que todo mejore.
- Mantenerse activo ayuda en la mejoría de los síntomas, igualmente se recomienda planificar una serie de actividades a realizar cada día, solo o acompañado, pero que resulte divertida y distraiga de la problemática.
- Tener pensamientos positivos y practicarlos.
- Rodéese de personas que son positivas y tienen comportamientos saludables.
La depresión, probablemente es una de las enfermedades que ha estado presente en todas las épocas y que no hace distinción de edad, género, estilo de vida ni situación socioeconómica, por lo tanto todos debemos estar atentos y asumir una comportamiento responsable frente al cuidado de nuestra salud mental.
Recuerde, cualquier depresión puede ser superada si es detectada y diagnosticada a tiempo.
Paula Andrea Restrepo Arango
Psicóloga.