La crisis de la salud que afronta el país tiene en alerta a varios de los más importantes centros de salud del Oriente antioqueño
De los tres lugares que, popularmente, se dice ningún hombre estar exento, la cárcel, el hospital y el cementerio, quizá sólo estos últimos no estén afrontando una crisis en el país. No por el momento, al menos, pues de seguir la situación de las EPS en quiebra, y los miles de pacientes que están perdiendo su derecho vital a ser atendidos, no va a haber “tumba pa’ tanto muerto”.
Y no son presunciones fatalistas. La crisis del sector de la salud que está afrontando el país, ha llegado a límites insospechados. Algunos de los más importantes centros de salud de la región, están en una situación que los ha llevado a tomar medidas radicales, ante la falta de soluciones reales y las deudas de varias EPS que suman cifras millonarias.
Las soluciones o decisiones parciales, son apenas medidas de contingencia ante un inminente colapso total del sistema de salud. Vale aclarar que no se están cerrando hospitales. La Clínica Somer, por ejemplo, está operando con una demanda mayor a la del año pasado. La información distorsionada sobre el estado del Centro puede empeorar la crisis. Sí se han cerrado, en cambio, servicios a ciertas EPS que tienen deudas grandes con la Clínica. Aun así, y con este panorama que tiene afectados a 180 mil usuarios de Cafesalud, Médicopreventiva y Coomeva, la Clínica ha hecho todo lo posible por controlar la crisis y su situación es una de las más “sanas” a nivel de toda la región.
Con Coomeva, por ejemplo, ya se llegó a un acuerdo. En los próximos días la clínica va a abrir ciertos servicios para los pacientes de esta EPS. Cancerología completo, obstetricia, maternas de alto riesgo y oftalmología, serán los servicios a los que los pacientes podrán acceder en la Clínica Somer. Diferente es la situación de los afiliados a Cafesalud que llegan a 55 mil en todo el Oriente y hoy es la población más afectada.
Según el Doctor Ramiro Posada, Gerente de la Clínica Somer, la situación actual “ya se volvió una crisis social, trascendió de una crisis financiera y de salud, y pasó a una social, porque la población se está quedando sin un derecho fundamental”, por eso las decisiones que se tomaron desde la Clínica. “La labor de un gerente no es esperar que la compañía quiebre, sino tomar medidas previas. Si la clínica cierra, ya no sólo se afectan 180 mil usuarios, sino los 600 mil que atienden. No es sólo Rionegro, sino muchos municipios del oriente y el resto del departamento”.
Pero no sólo se opta por acciones radicales como el cierre de servicios a los usuarios. Desde la propia Clínica se invita a la población a manifestarse, a marchar, a salir a las calles para llamar la atención del Gobierno local, departamental y nacional frente a los problemas actuales. “El llamado a la comunidad es que salga a las marchas, las asociaciones de usuarios del Oriente están convocando a una el próximo jueves 21 de abril, a las 8am, desde la glorieta del Éxito, para mostrarle al gobierno que ya es una crisis social (…) Nosotros, los empleados de la Clínica vamos a salir a marchar, pero no como empleados, sino como usuarios, como personas de esta comunidad”.
A propósito, Óscar López, líder de la Asociación de usuarios de la Clínica Somer y Hospital Alberto Mejía, afirma que “Los plantones se están convocando de forma pacífica, para que la gente se haga sentir, la intención es convocar a todos los hospitales regionales, de El Carmen de Viborla, El Santuario, La Ceja, Guarne, que nos sensibilicemos frente a esto y nos manifestemos. No hay necesidad de salir a tirar piedras y a violentar a nadie, sino a manifestaros, a que nos vean”.
Hoy son cuatro las EPS de mejor “salud financiera, que sostienen económicamente a La Clínica Somer, las mismas que, según su gerente, recomienda a los usuarios trasladarse a ellas: Colsánitas, Saludtotal, Sura y Nueva EPS. Sin embargo, su capacidad no es ilimitada, y sin la ayuda del Gobierno y una pronta intervención, también van a colapsar. Por eso, la invitación a manifestarse es general, no sólo a los usuarios afectados actuales.
Para Fernando Soto García, coordinador de mesas de trabajo y asociaciones de usuarios de Rionegro, “la Crisis de la salud ha afectado a todos (…) Queremos que el gobierno nacional y departamental se ponga la mano en el pecho. Se entiende que sin salud no hay paz, es un derecho fundamental (…) Esto es un problema de todo el pueblo colombiano”.
Ofelia Mora López, Presidente de la asociación de usuarios de Centros especializados San Vicente de Paúl, también hace extensiva la invitación a toda la ciudadanía a manifestarse. La salud no puede convertirse en un privilegio de unos pocos, es un derecho fundamental que hay que reclamar. Las marchas, plantones y acciones civiles, son la manera de levantar una voz de protesta ante una enfermedad que nos toca a todos.
Aunque la crisis no ha llegado al extremo fatal del cierre total de los centros de salud, hospitales o clínicas, las soluciones deben ser prontas, eficientes, eficaces y definitivas. El derecho de miles de personas se está viendo vulnerado por la falta de intervención desde el Gobierno Nacional. No se puede esperar a que colapse la capacidad de las EPS de mejor “salud financiera”. Puede pasar, por supuesto, los médicos también se mueren.