Por Catalina Alvarez Valencia,
Profesional en Planeación y Desarrollo Social
Especialista en Teoría, Métodos y Técnicas de Investigación Social
Integrante de MONARCAS
La planeación es una acción que todo individuo realiza en su cotidianidad, todo el tiempo estamos planeado y ejecutando acciones, todo para alcanzar unos propósitos. En suma esto es planear. Pero cuando hablamos de planeación con perspectiva de género, le estamos agregando otros elementos que permitirán generar cambios transcendentales en la vida de mujeres y hombres, en una sociedad que tenga como propósito un desarrollo integral con equidad e igualdad.
La sociedad está integrada por individuos diferentes, complejos, todos diversos y con intereses diferentes, planear una región, una ciudad o una localidad ignorando esas diferencias, es pretender que todos pensamos y actuamos igual.
La Planeación con Perspectiva de Género (PPG) busca incorporar estrategias en los planes, programas y proyectos que permitan responder a las necesidades e intereses tanto de hombres como de mujeres, pero también busca transformar las roles de género que han sido aceptados por la sociedad y que han traído consigo desigualdades y carencias de desarrollo para las mujeres.
La PPG solo es posible cuando:
Se tiene una conciencia de género, es decir comprender que las necesidades e intereses de mujeres y hombres son diferentes, y que estas diferencias han traído desigualdades.
Se desarrollan acciones positivas, eliminando los obstáculos para acceder a oportunidades o beneficios por parte del colectivo o persona perjudicada, de manera que pueda favorecerse de la oferta de programas o proyectos que mejoren su calidad de vida.
Se actúa con perspectiva de género, entendiendo las particularidades entre mujeres y hombres para planificar acciones que permitan transformar las situaciones que generan desigualdad, esto implica conocer su situación en aspectos educativos, económicos, sociales, políticos y salud, entre otros.
Se transversaliza el género en las instituciones, esto permite que desde diferentes entidades y dependencias públicas o privadas se conozca la situación de mujeres y hombres y se actué de manera práctica para atenderlas, esto permite la asignación de recursos por parte de las instituciones, y que se intervenga eficazmente, no dejando la responsabilidad en manos de una sola entidad, ya sea esta una oficina o programa para la mujer.
Para planear con perspectiva de género es necesario: Tomado de: Herramientas Conceptuales: Planeación con Perspectiva de Género. GTZ. 2008 [i]
Lo anterior implica transformaciones y cambios en las estructuras tradicionales, generando nuevas formas de planificación, nuevos procedimientos en el uso, manejo y análisis de la información, lo que implica que tanto desde el diseño hasta la ejecución y evaluación de los proyectos se estén revisando como se van incorporando las acciones pertinentes que den respuesta a las necesidades e intereses de los individuos, de manera que sean oportunas.
Para ello es preciso incorporar en los proyectos de desarrollo, un diagnóstico que permita identificar necesidades, posterior se planeen las acciones para garantizar el acceso a oportunidades, se haga seguimiento a su implementación y finalmente se evalué el impacto que éstas acciones han tenido en las personas, para finalmente hacer ajustes que permitan una intervención con impacto social positivo.
Además de lo anterior, la PPG es una estrategia de planificación que debe ser coherente con la gestión pública, es decir que en sus procesos se incorporen acciones no solo en su etapa de planificación, sino además en la asignación y gestión de recursos, tales acciones permitirán no solo conocer de manera más ajustada la realidad de la población, sino que además se podrá ser más eficiente en el gasto de los recursos públicos en beneficio de la comunidad, logrando así mayor equidad.
De acuerdo a la autora Roxana Volio, “una planificación realizada de esta manera elabora sus planes y proyectos ajustándose a la realidad y tomando en cuenta a la gente, por lo que éstos pueden tener mayores posibilidades de éxito, mayor impacto social, económico y político” (Volio, 2008) El reto está en comenzar a construir una sociedad diferente, y un paso para ello, es desde los procesos de planificación con perspectiva de género.
