Las mariposas, en términos generales, resultan atractivas para la gente y algunas especies cuentan con gran popularidad. Son parte de la herencia natural y han sido estudiadas en detalle durante los últimos 300 años.
Tienen un proceso de metamorfosis – transformación que experimentan determinados animales en su desarrollo biológico y que afecta no solo a su forma, sino también a sus funciones y modo de vida; es típica de los poliquetos, equinodermos, insectos, crustáceos y anfibios –. Desde la postura del huevo hasta ser una mariposa es un proceso cambiante basado en cuatro etapas: huevo, larva (oruga), pupa (crisálida o capullo) y adulto.
“La mayoría de las especies pone sus huevos en una planta específica (hospedera), que sirve de alimento a las larvas cuando nacen, que en caso tal de desaparecer y sólo una especie dependa de esta, se verá afectada y también su extensión. Ellas pueden volar kilómetros buscando las plantas”, expresa Natalia Hernández, Administradora Mariposario La Trinidad ubicado en el kilómetro 3.8 vía Rionegro – El Carmen de Viboral.
Un pequeño porcentaje logra completar el proceso de metamorfosis, debido a que la mortalidad es alta, más del 90 por ciento de los huevos puestos por las mariposas no sobreviven (por condiciones en su medio natural, agroquímicos, atacadas por otros insectos o animales).
“Los mariposarios se convierten en un espacio de crías controladas, debido a las condiciones de adecuación dispuestas para ellas, con el fin de garantizar su sobrevivencia y se logra disminuir el porcentaje de mortalidad, pasando de un 90 a un 20 por ciento”, dice Natialia.
Dependiendo de la especie, cuando están en el momento de ser crisálida tardan en promedio de una semana o más su proceso para convertirse en mariposa.
Una mariposa en promedio sobrevive de 2 a 6 semanas, esto varía según la especie. Son seres de sangre fría y su energía depende del sol como en algunos reptiles, si no hay sol no hay energía, se quedan quietas y sin comida, porque no vuelan para alimentarse y tampoco se aparean.
Ellas son polinizadoras al igual que las abejas y también pertenecen a base de la cadena alimenticia de otros animales (arañas, aves, ranas, erizos, …).
La oruga es una podadora natural y los desechos que hace es la misma plantica procesada es abonado para la misma planta. Ella no llega al punto de comerse el 100 por ciento de las plantas hasta matarlas, a menos de que lleguen varias a una misma. Sirve como poda natural que le ayuda a crecer y estar en mejores condiciones la planta.
Las mariposas son criaturas apreciadas por el ser humano, por su grácil belleza. Su vuelo y sus colores cautivan y embellecen los ecosistemas
Natalia Hernández, Administradora Mariposario La Trinidad ubicado en el kilómetro 3.8 vía Rionegro – El Carmen de Viboral.